Este es el resultado de mi ejercicio. Fue divertido y conseguí encajar todas las palabras, aunque los resultados sean más que dudosos...
"La diáspora del pavo real se produjo justo cuando el reloj de la cocina marcaba la hora límite para ir preparando el asado navideño. Todos luchamos con él durante un rato interminable. Mi padre soltaba mil maldiciones por su boca. Mi madre en la lucha se había soltado el pelo y el tejido de su blusa aparecía impregnado de grandes manchas de sudor.
El abuelo nos observaba a todos desde su sillón con la impasiblidad de los últimos meses. Si no hubiésemos estado tan ocupados, nos hubiéramos dado cuenta de que sus ojos parecían animados por un brillo jovial que nos habría dejado a todos perplejos. Por eso, nos pilló desprevenidos la rapidez de reflejos de su cuerpo vegetal para alcanzar la escopeta de caza y lanzar un disparo contra la pieza. Sentí como el roce de la bala se llevaba por delante parte del lóbulo de mi oreja. Por unos instantes la escena se paralizó como si de un extraño Christma se tratase. El pavo cayó fulminado. Una muerte inútil después de todo. Aquella noche nadie quiso cenar. "
6 comentarios :
Guau Teresa. Te ha quedado genial. Sorprendente y divertido, además de haber encajado estupendamente todas las palabras. Me ha gustado mucho.
Te ha quedado "de Navidad". Muy divertido.
Alicia.
a mi me gusta. Feliz navidad Teresa
Un buen cuento de navidad, Teresa. Ajustándote a lo que pide el ejercicio y con un toque de humor.
Me gusta.
Un beso :-)
Y feliz navidad
(incluso para el pavo)
Así me gusta, un método rápido y seguro, el abuelo sí que sabe...
Me ha gustado mucho, Teresa.
Un beso.
Gracias a todas por vuestros comentarios. ¡Feliz Navidad!
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